
En el colegio o en la Universidad es habitual que tengamos que redactar textos de diferente contenido y longitud para ser evaluados por los profesores. Aunque podamos pensar que para redactar simplemente basta con ponerse a escribir, si queremos quela redacción sea correcta y organizada, y por tanto obtener buena puntuación en la evaluación, debemos seguir una serie de pasos a la hora de prepararlo.
Lo primero que tenemos que determinar es sobre qué tema vamos a hablar. Para ello, además de elegir dicho tema, haremos un esquema con los puntos que queremos tratar en torno a él. Esto es necesario, además de para estructurar bien el texto, para saber sobre qué puntos debemos recopilar información. Una vez que lo hayamos determinado, recabaremos dicha información para tenerla a nuestra disposición cuando vayamos a comenzar a redactar.
De este modo, evitaremos interrupciones que nos hagan perder el hilo de la misma y no quedará ningún punto importante sin tratar.
A la hora de redactar, debemos seguir el esquema Introducción, nudo y cierre o desenlace. De este modo, sabremos cómo repartir la información a lo largo del mismo, despertar el interés y no divagaremos dispersando las ideas aquí y allá sin ningún orden lógico.
Es importante cuidar la conjugación de los verbos, de forma que se coordinen con la acción que estamos redactando, especialmente si nos han pedido un texto narrativo o literario. Con ello, el texto tendrá mucha más lógica y será más sencillo de seguir para el lector o el evaluador.
Un diccionario de sinónimos resulta imprescindible a la hora de redactar para evitar repeticiones de palabras. Si no lo hacemos así, aunque el contenido del texto sea interesante y hayamos dedicado mucho tiempo a recopilar, ordenar información y estructurar el texto, el resultado será más pobre y parecerá que repetimos las mismas ideas una y otra vez.






