Muchos estudiantes de inglés se quejan de que, a pesar de tener un amplio conocimiento sobre la gramática, el vocabulario y otros aspectos del idioma, a la hora de tener que utilizarlo en una conversación no son capaces de hacerlo de forma fluida, sino que se bloquean y se quedan en blanco o tienen que hacer un esfuerzo para construir en su mente la frase que quieren decir y luego emitirla.

Una de las maneras de evitar esto es mediante la práctica de la conversación en inglés. Podemos hacerlo a través de Internet o en un intercambio cara a cara con un estudiante extranjero pero, sin duda, el mejor modo de practicarlo es en un grupo de conversación donde haya hablantes nativos de inglés, ya que esto nos permitirá mejorar nuestras comprensión y expresión oral en una situación que nos familiarizará con hablantes nativos.

Uno de los mayores desafíos con los que se encuentra quién está aprendiendo una lengua extranjera es mejorar su nivel de conversación, es decir, ser capaz de entender y expresarse en la otra lengua sin tener que buscar las palabras en su cerebro o sin sentirse ridículo o temeroso de cometer gran cantidad de errores. Uno de los métodos que más nos pueden ayudar a lograr esto es participar en grupos de conversación, en los que participan tanto quienes están aprendiendo a hablar un idioma como personas nativas de dicha lengua.

Habitualmente, estos grupos se reúnen una vez a la semana. Pueden ser organizados por las academias, a través de Internet o incluso en determinados establecimientos, como es el caso de los grupos de conversación en inglés a los que se puede acceder en determinados pubs irlandeses en las grandes ciudades.