Consejos para repasar un examen

Cuando nos acercamos a la fecha del examen es el momento de comenzar con los repasos para fijar bien en nuestra memoria todos los conceptos de forma que el día que nos examinemos no suframos ningún bloqueo ni olvido. Sin embargo, muchos estudiantes no saben bien cómo organizarse estos repasos, llegan incluso a olvidarse de ellos, cuando de los repasos finales muchas veces depende el éxito en nuestros exámenes.
Lo primero que deberemos hacer es preparar un programa de repasos, de forma que sepamos cuánto tiempo necesitamos para preparar la materia e intentando siempre que nos queden al menos tres o cuatro días antes del examen, días que utilizaremos en dar un repaso final general, con el cual nuestro estudio habrá concluido.
A la hora de repasar para un examen, debemos tener en cuenta que no es necesario leerse todo el temario por completo, ya que ello nos cansaría y nos haría perder mucho tiempo. Lo mejor es repasar tan sólo los esquemas y resúmenes que hayamos realizado a lo largo del periodo de estudio.
A continuación deberemos intentar recitar el temario que hayamos estudiado sin ayuda del libro ni de los apuntes, para comprobar el grado de memorización que hayamos logrado. Si nos resulta aburrido o nos pone nerviosos simplemente recitar el temario, podemos realizar mientras lo hacemos un mapa conceptual, reflejando en ellos toda la información que hayamos memorizado, como un esquema del esquema. De este modo, sabremos no sólo si realmente nos acordamos del temario, sino también si lo hemos comprendido, lo cual nos va a ayudar a realizar el examen.
Mientras repasamos es buena idea intentar hacer las preguntas que nos pueden caer en el examen y ver si las podemos resolver.
Finalmente haremos una lectura completa de todo el temario, con lo cual nuestro repaso habrá finalizado. Ya sólo quedará descansar bien y hacer el examen.





