Después del largo curso escolar, llegan por fin las ansiadas y merecidas vacaciones, que ayudarán a nuestros hijos a recuperar las fuerzas para encarar el curso siguiente.

Si han suspendido alguna asignatura, se verán en la obligación de dedicar cada día un tiempo al estudio para superarla en septiembre, pero, incluso si lo han aprobado todo, es aconsejable aprovechar para recordar y reforzar los conceptos aprendidos durante el curso, pero, dado que están de vacaciones, es importante que esto se haga de forma divertida y dinámica, dándole al aprendizaje un toque lúdico que resulte atractivo a los niños.

Llegan las vacaciones y los estudiantes tienen por delante tres meses de, para muchos, un merecido descanso después del esfuerzo que han realizado durante todo el año escolar. Otros no tienen tanta suerte, y tienen que dedicar tiempo durante el verano para recuperar esas asignaturas que no han aprobado durante el curso.

Con respecto a los primeros, a los padres les surge siempre la duda sobre si deben hacer deberes o alguna tarea escolar durante las vacaciones o es mejor dejarles desconectar totalmente y que vuelvan a retomar el contacto con los estudios cuando vuelvan al colegio o al instituto en el mes de septiembre.

Como todo, en el punto medio está la virtud, y es algo en lo que parecen estar de acuerdo los expertos. Las vacaciones son un periodo hecho para que los alumnos descansen, pero ello no significa que deban olvidarse de todo lo que han aprendido durante el curso, sino que se puede aprovechar las vacaciones para reforzar o refrescar los conocimientos aprendidos.