Trabajar en el extranjero como Au-pair
Decidirnos a pasar un periodo de nuestra vida trabajando en el extranjero es una experiencia que nos reporta múltiples beneficios: a nivel personal nos ayuda a madurar y aumentar nuestra autoconfianza, ya que muchas veces debemos hacer frente sin ayuda a situaciones que nunca se nos habían planteado, lo que también incrementa nuestra capacidad de resolver problemas. Así mismo nos ayuda a perfeccionar un idioma e indudablemente representa una experiencia muy atractiva a la hora de consignarla en nuestro curriculum.

El problema radica en si queremos trabajar fuera de nuestro país cuando aún no hemos terminado nuestro estudios, lo que hace que no tengamos suficientes conocimientos y experiencia para desempeñar muchos trabajos. En ese caso una de las opciones que más oportunidades nos brinda es salir a trabajar como Au-pair.

El trabajo de Au-pair es un tipo de trabajo temporal que se realiza en el extranjero y cuyas funciones principales consisten en cuidar los niños de las familias con las que el trabajador se aloja. Dado que la familia le proporciona alojamiento y manutención, la remuneración no es muy alta pero suficiente para disponer de dinero para sus gestos.

La estancia para este tipo de empleos suele variar entre seis meses y un año, excepto cuando se realiza en los meses de verano, en cuyo caso suele ser más corta.

La jornada laboral que se desempeña está en torno a unas cinco horas diarias y se dispone como mínimo de un día libre a la semana.

Las características que se suelen requerir para ser au-pair en un país extranjero son:

- Tener entre 18 y 30 años

- Conocer mínimamente el idioma. También se valora tener carné de conducir.

Estos requisitos pueden variar en función del país de destino que elijamos. Aunque normalmente han sido chicas quienes se han decidido por esta opción cada vez más chicos se están acercando a ella.