
Cuando nos enfrentamos a una entrevista de trabajo, esperamos que en algún momento nos planteen esa mítica pregunta: “¿Tienes alguna duda?”. Con los nervios, solemos olvidarnos de las preguntas que queremos hacer…
Se acerca el final de la entrevista y quieres preguntar algo, ¿tienes claro el qué? Nosotros te ayudamos con algunas posibles preguntas para cultivar una buena imagen frente al entrevistador.
Tu interés por la empresa
Para demostrar tu interés hacia la empresa a largo plazo, una buena pregunta es si hay algún plan de carrera o posibilidades de ascender. Otra buena pregunta que también deberías hacer es sobre la cultura de la empresa. Por supuesto, se recomienda hacer este tipo de preguntas siempre y cuando el entrevistador no las haya respondido antes. Aunque también puedes adaptarlas a su discurso.
Y no olvides que en el primer encuentro no se aconseja centrarse demasiado en el aspecto económico, por lo que debemos esperar a que sea nuestro entrevistador el que saque el tema.

Resolver dudas
Otra pregunta interesante puede ser ¿qué aspectos tiene en cuenta la empresa para escoger al candidato? O bien, si lograra el puesto, ¿quién sería mi jefe?… Pero además de todas estas preguntas, tampoco olvides dedicar algunos minutos de tu tiempo para resolver todas las posibles dudas que te hayan surgido a lo largo del encuentro.
Y si todavía no te lo ha preguntado el entrevistador, otra buena idea puede ser sorprender con una pregunta diferente e improvisada, así que pregúntale si quiere saber cómo podrías ayudar tú a la empresa. Se trata de una pregunta un tanto arriesgada y se recomienda solamente si el encuentro ha sido satisfactorio.
Es el momento perfecto para promocionarnos, ahora que tenemos toda la información sobre la empresa y el puesto de trabajo.
Cosas que no debes preguntar
Por el contrario, lo que no debemos preguntar, además del salario, son las vacaciones y los horarios. Todos estos temas se tratarán más adelante, no en el primer encuentro.










