Formación gratuita para trabajadores en activo
Aunque estemos trabajando siempre es importante y muy aconsejable completar nuestra formación, la mejor manera de reciclarnos y de actualizar nuestros conocimientos, y si además podemos hacerlo gratis mucho mejor.

En este sentido, la formación continua se perfila como una de las grandes apuestas, tanto para las empresas como para sus trabajadores. Uno de los motivos es que a través de estos cursos se pretende mejorar la productividad de las empresas, proporcionando a los trabajadores nuevos conocimientos y prácticas que cualquier negocio necesita. En cuanto a las materias de estudio, encontramos una gran diversidad temática y específica para cada sector y actividad.

La formación permanente está dirigida a trabajadores en activo que favorecen la promoción de la empresa para la que trabajan. La Seguridad Social y la Hacienda ponen a disposición de las empresas una cantidad mínima de 420 euros destinados a la formación de sus empleados.

Como es lógico, esta cantidad es proporcionar al número de trabajadores contratados por la empresa durante el año anterior, y si no se utiliza, se pierde. Los requisitos que deben cumplir los trabajadores para poder participar en esta formación continua, es estar acogido al Régimen General de Seguridad Social al inicio del curso, como un trabajador en activo.

Por supuesto hay que tramitar la inscripción al curso en cuestión, ya sea a través de la propia empresa o de la asociación en la que trabaja el empleado. Y por último, es necesario cumplimentar todos los documentos necesarios para inscribirse en dicho curso, sin olvidar por supuesto finalizar la actividad formativa completa.

Un detalle que no deja de resultar sorprendente es el desconocimiento de muchas empresas ante esta formación continua y subvencionada, y sus múltiples ventajas. De hecho, España se encuentra entre los países de la Unión Europea que menos horas dedicada a la formación de sus trabajadores.