
Siempre se dice que es muy importante generar un ambiente de trabajo distendido y agradable no sólo para favorecer las relaciones entre los empleados y los jefes, sino también para aumentar la productividad de cualquier empresa.
Cuando estamos a gusto en nuestro puesto de trabajo rendimos mucho más, sin embargo, teniendo en cuenta que pasamos muchas horas en la oficina se pueden presentar situaciones conflictivas que pueden ser difíciles de superar.
Un consejo si no te entiendes bien con tu jefe es que expongas de una manera clara, directa y respetuosa tus puntos de vista. En este sentido no dudes en consultar tus dudas y opiniones a algún superior de tu jefe, siempre y cuando lo consideres realmente necesario. Asimismo el apoyo de tus compañeros de trabajo es fundamental para determinar si se trata de un problema colectivo o sólo individual.
Otro problema sobre el que se ha hablado mucho en los últimos años es el mobbing, también conocido como acoso moral en el trabajo. Se trata de una situación absolutamente denunciable ante el comité de empresa o ante los delegados sindicales.
También puedes optar por una demanda judicial o una denuncia de urgencia en la Inspección de Trabajo. Sin embargo, en estos casos es difícil demostrar que estás siendo víctima de este acoso laboral, ya sea por culpa de tus compañeros o de tus jefes.
Otra situación habitual son los conflictos con los compañeros de trabajo. Lo mejor es abordar estos problemas desde el principio y plantear la situación de una manera directa. Si a pesar de todo no consigues resolver la disputa, lo mejor es comunicárselo a tu jefe o al responsable de Recursos Humanos.
En muchos trabajos es frecuente encontrar a empleados que se sienten amenazados ante la presencia de una persona nueva, eficiente y con experiencia. En estos casos lo mejor es aclarar las cosas cuanto antes para evitar males mayores.


























































2 comentarios
28 febrero 2011
Muchas veces los problemas surgen por mezclar aspectos personales con asuntos profesionales. Lo mejor es ser objetivo, descartar los puntos ajenos al trabajo y, cuanto antes, aclarar las diferencias profesionales con el fin de no perder tiempo y producir. El objetivo no es denunciar sino llegar a un buen entendimiento para que la empresa mantenga su competitividad y los puestos de trabajo.
21 marzo 2011
Medidas preventivas:
Diseñar puestos de trabajo con bajo nivel de estrés, alto control del trabajo, alta capacidad de decisión, suficiente autonomía temporal. Unas buenas condiciones laborales benefician unas buenas relaciones personales, y viceversa.
Adecuado estilo de mando; con desarrollo de habilidades para reconocer conflictos y manejarlos adecuadamente, siendo fundamental que no sean el origen del problema ya que una buena parte de las situaciones de mobbing vienen del abuso de las situaciones de mando.
Desarrollo de reglas claras, explícitas, escritas y públicas sobre resolución de conflictos personales, que garantice el derecho a la queja y el anonimato y que prevea sistemas de mediación y/o arbitraje).
Crear un sistema de comunicación en la empresa que favorezca el diálogo entre las distintas partes de la organización; tanto a nivel vertical, equipo directivo-trabajadores; como a nivel horizontal, trabajadores-trabajadores.
Diseñar herramientas específicas estandarizadas, que detecten este tipo de situaciones y que midan las posibles consecuencias sobre los trabajadores/as.
Proporcionar entrenamiento y formación a los trabajadores en manejo de conflictos y relaciones personales.
Articular sistemas de presentación, acogida e integración de las personas recién incorporadas, sin olvidar la consideración de la cultura de la empresa en la selección de personal.