
Aprender un idioma se ha convertido casi en una asignatura obligatoria en un mundo como el actual, cada día más globalizado. Cuando nos decidimos a estudiarlo, una de las opciones por la que nos podemos decantar son las academias de idiomas, pero la dificultad surge cuando nos damos cuenta del volumen existente de las mismas, que muchas veces hace muy complicado seleccionar una en la que la formación en idiomas sea realmente de calidad.
Para elegir correctamente y no llevarnos sorpresas desagradables después, lo mejor es tener en cuenta una serie de puntos a la hora de valorar las academias que más nos interesen:
- Valorar la impresión que nos causa el local, el trato que recibimos, la calidad de las aulas, etc., es decir, si nos parece realmente un lugar preparado para la enseñanza de idiomas.
- Formación de los profesores: Saber si son nativos, si son bilingües, si han realizado estudios adicionales para formarse como profesores de un idioma extranjero, etc. Si podemos recibir una clase de prueba, podremos valorar si explica con corrección y fluidez, si domina la materia que enseña, etc.
- El método que se utiliza: Si se va a utilizar un libro en clase, es importante echarle un vistazo y valorar si nos sentimos cómodos con él y si nos gusta. También es necesario saber si el libro se va a complementar con otros materiales complementarios a lo largo del curso, como fotocopias, libros, DVD’s y otros métodos audiovisuales. También deberemos informarlos sobre cómo se realiza el trabajo en clase y en clase, los métodos de evaluación del progreso de los alumnos, etc.
- Finalmente, si nuestro objetivo es prepararnos para un examen oficial del idioma del que se trate, deberemos asegurarnos de que la academia tiene cursos específicos para la preparación de dichos exámenes.










