
Seguramente conocerás a muchas personas que creen haberse equivocado al elegir una carrera. Unas de ellas han deseado estudiarla desde que estaban en el colegio, y cuando han llegado a la universidad se han dado cuenta de que la carrera en cuestión no era lo que esperaba.
Otras personas no han tenido ninguna vocación en especial, y se han limitado a hacer una elección apresurada en el momento de hacer la preinscripción en la universidad, dejándose llevar por lo que les decía la familia, los amigos, etc.
En cualquiera de los casos el resultado es el mismo, y es que no están satisfechas con su elección. Por ello, para intentar que tu elección sea lo más acertada posible, nada mejor que seguir estos consejos:
- Elige cuatro o cinco carreras por las que tengas interés y reúne toda la información que puedas sobre ellas. Internet, libros, personas que la estén estudiando o que ya hayan finalizados sus estudios…, cualquier fuente es buena para saber si esos estudios cubren tus expectativas o no tienen nada que ver con lo que tú esperas. Seguramente en el Instituto podrás hablar también con el Orientador para que te informe más detenidamente sobre dichos estudios.
- La carrera que te gusta o la que tiene futuro. Esta decisión es complicada, ya que estudiar una carrera que no nos gusta sólo porque tenemos una salida laboral asegurada puede ser una decisión muy dura y que a la larga se nos haga cuesta arriba sacar adelante. Pero tampoco tiene mucho sentido cursar unos estudios durante un periodo más o menos largo de tiempo de una licenciatura con la que nuestras posibilidades de integrarnos en el mercado laboral son nulas. Lo mejor es encontrar una solución intermedia, bien buscando entre los muchos programas de estudios que hoy ofrecen las universidades, uno en el que puedas aunar las dos preferencias.


























































