
Con la situación económica en la que nos encontramos son muchos los trabajadores que han visto en el trabajo freelance una interesante forma de aumentar sus ingresos, o bien de adquirir más experiencia profesional. Algunos profesionales como diseñadores gráficos, fotógrafos o arquitectos han optado por esta alternativa laboral, porque aunque tengas trabajo, tal vez te interese realizar tus propios proyectos y ganar un dinero extra que siempre es muy bien recibido.
Sin embargo, ¿sabes cuáles son las claves para comenzar como autónomo? Si tienes serias dudas acerca de esta situación te conviene seguir leyendo este artículo para descubrir todo lo que necesitarás saber. Lo primero que deberás hacer será darte de alta como autónomo en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos, bien como empresario o profesional autónomo. La declaración censal es otro aspecto que tendrás que tener muy en cuenta, lo que quiere decir es que aquellas personas que van a desarrollar actividades económicas deberán solicitar la inscripción en el Censo de empresarios, profesionales y retenedores.
En este sentido hay que hablar del IRPF, el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, así que en el momento de realizar la declaración censal, el empresario individual deberá escoger entre dos métodos de estimación IRPF: directa normal y directa simplificada. El siguiente paso será darse de alta en el Régimen Especial de Autónomos de la Seguridad Social, donde tendrás que escoger una mutua de accidentes de trabajo para la correspondiente cobertura de incapacidad temporal, en caso de accidente o enfermedad común.
Otro término clave a la hora de empezar a trabajar como autónomo serán las obligaciones contables. Aquí se encuentra el libro de visitas, que es obligatorio para todas las empresas y trabajadores por cuenta propia, tengan o no trabajadores a su servicio; y el libro de matrícula, tan sólo cuando se contraten trabajadores. Por último, si necesitas disponer de un local tendrás que obtener las correspondientes licencias para su apertura.
Cuando hayas comenzado tu actividad como autónomo tendrás que cumplir con una serie de obligaciones fiscales y contables, tales como declaración y liquidación del IVA, pagos fraccionados del IRPF, retenciones e ingresos a cuenta, declaración anual de operaciones con terceros, y por último, operaciones contables y registrales. Aunque por supuesto, es fundamental tener en cuenta el tipo de actividad en cuestión que vas a realizar, porque en función del tipo de profesión, las obligaciones pueden ser diferentes, así que infórmate cuando vayas a darte de alta como autónomo acerca de cuál sería tu caso.































































